Consumiendo productos ecológicos apoyamos una forma de producción y consumo más armónicos con la naturaleza y el ser humano.
Tenemos garantía de seguridad alimentaria. Los alimentos que consumimos tienen la práctica totalidad de los nutrientes, más sabor y su textura es mucho más agradable.
Estamos consumiendo alimento, no simple producto.
Por otra parte, estamos fomentando el respeto a los ciclos naturales de la tierra, de las plantas y de los animales que intervienen en su producción. Nos garantizamos que no hay sobreexplotación de la tierra.
Además, su producción es más económica porque depende menos de la industria química farmaceutica.
En definitiva, estamos alimentándonos de forma responsable asegurándonos, al mismo tiempo el futuro de nuestro planeta.
"LA TIERRA NO ES UN REGALO DE NUESTROS PADRES, ES UN PRESTAMO DE NUESTROS HIJOS"
(proverbio africano)
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